Parece bastante sencillo: Enviar mensajes de texto y conducir es peligroso. A todos nos lo enseñan en la formación de conductores. Incluso los que recibieron la formación hace años, antes de que los mensajes de texto fueran una preocupación, han visto los anuncios y los anuncios de servicio público. La gente sabe que enviar mensajes de texto en el coche conlleva cierto riesgo y puede provocar accidentes, y por eso un estado tras otro ha decidido prohibirlo.
Sin embargo, la gente sigue haciéndolo. Sin duda, hay algunos casos de ignorancia, en los que la gente no entiende el riesgo a pesar de toda la información que hay, pero probablemente sean raros. La mayoría de la gente lo sabe. ¿Por qué conducen y envían mensajes de texto?
1. Sobreestimar las capacidades
Una posible razón es que los conductores sobrevaloran sus propias capacidades. Piensan que, aunque es peligroso para los demás, ellos son lo suficientemente buenos como para que no sea tan peligroso para ellos. El problema, por supuesto, es que mucha gente piensa así, y las estadísticas de accidentes demuestran que se equivocan.
2. Intentar realizar varias tareas a la vez
Otro problema es que la gente intenta hacer varias cosas a la vez, aunque en realidad eso signifique dividir su atención y saltar de una tarea a otra, no hacer varias tareas al mismo tiempo. Una vez más, la gente también asume que puede hacerlo aunque a los demás les resulte difícil.
3. Frente a la presión exterior
Por desgracia, la facilidad de comunicación que ofrece el teléfono móvil ha creado una cultura en la que la gente espera recibir respuestas a sus mensajes de texto rápidamente. Si la gente no responde en tan sólo 15 minutos, puede empezar a sentirse frustrada. Atrás quedaron los días en que llamabas al teléfono fijo de alguien y, si no estaba en casa, no podías hablar con él.
Esta nueva perspectiva puede crear presión. Alguien puede oír el mensaje y saber que no debe comprobarlo. Pero también sabrá que está a una hora de su destino y pensará que es demasiado tiempo para esperar. Intentará enviar el mensaje y conducir debido a esa presión.
4. Afrontar la adicción
La adicción al teléfono también es un problema considerable. Algunas personas se sienten esencialmente adictas a esas notificaciones de las redes sociales de que a alguien le ha gustado una foto que ha publicado o ha comentado un estado. Al cabo de poco tiempo sin mirar el teléfono, no pueden dejar de pensar en lo que pueden haberse perdido. Arriesgarán su vida, y la de los demás, si deciden consultar el teléfono mientras están en el coche.
Sus opciones
Estas son sólo cuatro razones por las que el uso del teléfono en el coche continúa, y por las que no va a terminar pronto. Hay muchas más. Si te atropella un conductor distraído y sufres lesiones graves, debes saber qué opciones legales tienes.